Nadie más que una es responsable de su propia felicidad y somos nosotras mismas quienes tenemos que actuar para conseguirla.
Según el psicólogo español Antoni Bolinches “las tres principales fuentes de felicidad de los adultos son la congruencia interna, la realización personal y el amor armónico”.
No se puede ser feliz sin estar en paz con una misma, por eso es fundamental ser coherente con lo que creemos y sentimos, aunque los valores sociales actualmente sean tan competitivos y hasta inhumanos.
Mantener nuestras propias convicciones es un reto que debemos enfrentar si queremos crecer verdaderamente.
Otro aspecto importante es tomar positivamente aquellas circunstancias que consideramos fracasos, viéndolas no como pérdidas, sino como inversiones a futuro, tratando de aprender de ellas.
La autoafirmación nos ayuda a ser como queremos y a alcanzar nuestros ideales. Trabajar con la autoestima nos ayuda a aceptarnos, a mejorar y a valorar más nuestro propio potencial y no el ajeno.
Esto también aplica en la realización personal, que va más allá del éxito profesional o económico, sino con expresar nuestras capacidades de manera de sentirnos satisfechas con quienes somos.
Finalmente, el amor armónico, según Bolinches, se logra cuando, al mejorar como personas, logramos querernos y valorarnos más. Como consecuencia, se logra encontrar una pareja a medida. Si tenemos una visión positiva de nosotras mismas, logramos evitar relaciones problemáticas, somos capaces de confiar en los sentimientos que el otro nos expresa porque nos sabemos merecedoras de un gran amor.